El CEO de Lukoil estará en la Argentina el 11 y 12 de diciembre y llega acompañado por su equipo de desarrollo de negocios. La venta de las empresas del Grupo Índalo sigue frenada por la Justicia.
Las últimas decisiones judiciales hacen ver cada vez más lejano el traspaso de las acciones del Grupo Indalo al grupo financiero OP investment, que desde octubre busca quedarse con las empresas de Cristobal López, hoy inhibido.
Pero una nueva jugada se suma ahora a la fallida venta: el managing director de Lukoil para las Américas, Simon Fenner, visitará la Argentina el 11 y 12 de diciembre y ya pidió una reunión con el presidente Mauricio Macri.
Según confirmaron a El Cronista fuentes cercanas a la empresa, la solicitud aún no tuvo respuesta del Gobierno. Fenner vendrá acompañado de su team de desarrollo de negocios.
La petrolera rusa Lukoil había sido presentada como el socio estratégico de OP, el fondo liderado por Ignacio Rosner que busca quedarse con el grupo de empresas que formaban el Grupo Indalo, para realizar inversiones -se habló de unos 300 millones de dólares- y también hacerse cargo del management de Oil Combustibles.
Traba judicial
Se conoció que el juez Julián Ercolini rechazó levantar la inhibición de bienes a Cristóbal López, paso necesario para vender las acciones del Grupo Indalo.
El rechazo se debió, en parte, a que todavía no hay en la causa pruebas suficientes sobre el valor de las empresas.
Sin embargo, cerca de OP aseguran que no es algo definitivo y esperan que más adelante, con nuevos elementos, se autorice el levantamiento. En caso contrario, el riesgo es que no haya inyección de fondos y todo termine en una quiebra de las empresas.
Hoy la situación de las empresas es crítica. Incluso no podrían afrontar en los próximos días el pago de salarios a sus empleados. “Estamos al día con los sueldos pero el jueves pasado recibimos un mensaje donde se nos advierte que podría ponerse en riesgo del pago de los próximos haberes”, señaló a El Cronista Héctor Brizuela, secretario legal del Sindicatos Unidos Petroleros e Hidrocarburíferos (Supeh), que fue representante de los más de 400 trabajadores de Oil Combustibles en la refinería de San Lorenzo, Santa Fe, en el concurso de la empresa luego descartado por la justicia.
Con las cuentas inhibidas, las compañías del grupo se manejan mínimamente con los ingresos que se van generando. De todas, Oil Combustibles es la más endeudada, con una importante morosidad en su flujo de caja. Desde OP también reclamaron deudas de distintas reparticiones públicas por trabajos ejecutados y suministros entregados por más de $ 1200 millones, que incluyen a Vialidad Nacional, Cammesa y la Secretaría de Transporte.
A pesar de que Rosner y Dellatorre asumieron como presidente y vicepresidente en los directorios de las empresas del grupo, y le cambiaron su nombre a Grupo Ceibo, en el gerenciamiento diario de cada una se mantienen casi todos los ejecutivos de la gestión anterior.