La operadora actuó como solidaria. La desvinculación de la mayoría de los 32 trabajadores que no fueron absorbidos por la firma Huinoil, requirió el pago por indemnización. El cese de los contratos de trabajo es con la firma Prosepet. En Cañadón Seco y en Pico Truncado, cinco personas continúan con medidas de fuerza reclamando indemnización y continuidad laboral.
El pasado viernes se celebró un encuentro, en la sede de la Delegación Zona Norte de la Secretaría de Trabajo, entre la apoderada de Prosepet Lorena Domínguez, y los ahora ex trabajadores de la empresa. La reunión fue de carácter oficial y por ante la autoridad laboral. Comenzó a las 13:40 y marcó el fin del contrato de trabajo para los operarios.
En tanto, en la planta de YPF de Pico Truncado tres trabajadores que prestaban servicios en Prosepet, continúan con medidas de fuerza que incluyen campamento y quema de cubiertas. Reclaman ser indemnizados y reincorporados inmediatamente al ámbito laboral. En Cañadón Seco, otros dos trabajadores ocupan instalaciones de la empresa que se niegan a dejar. Son los últimos en dar continuidad a una lucha iniciada hace meses por 32 operarios.
Vale recordar que éstos no fueron tenidos en cuenta para sumarse a Huinoil, contratista que logró establecer una relación laboral con YPF SA.
El resto de sus compañeros accedió a la extinción de sus respectivos contratos de trabajo. Fueron absolutamente desvinculados de Prosepet a cambio de cobrar la indemnización, que quedó en manos de la operadora con mayoría estatal. YPF en su calidad de “solidaria”, que es la figura contractual que desempeñaba en relación a los trabajadores, desembolsará una suma superior a los 22 millones de pesos para hacer frente las indemnizaciones.
La Opinión Austral accedió a algunas de las actas de desvinculación, de las cuales se destaca una cláusula que expresa: “los trabajadores manifiestan que una vez percibida la suma única y total mencionada en la cláusula cuarta, absolutamente nada más tendrán que reclamar por ningún concepto a la empresa Prosept como así tampoco a la firma YPF SA, ni a sus gerentes, socios y/o representados con motivo de toda relación laboral habida con la misma”.
Asimismo subraya “desistiendo en consecuencia de toda acción o derecho que pudiere corresponderle”. De este modo, el sector empresario se asegura la extinción de cualquier pretensión posterior al acuerdo.
El cálculo realizado para conformar la suma de lo que se denominó “gratificación extraordinaria” incluye: Indemnización por antigüedad, haberes de mayo de 2018 y haberes de la liquidación final. Las sumas reales no se citan por motivos de seguridad.
La denominación “Gratificación extraordinaria por cese” se constituye en una suerte de “paraguas legal” para el sector empresario. Establece que el monto “resultará imputable” y “cancelatorio de todo rubro o concepto” de naturaleza salarial, indemnizatorio, previsional, o incluso “no salarial”.(LOA)