(Depetroleo-Gonzalo Díaz). El presidente Donald Trump tuiteó el jueves que Irán cometió un “gran error” al derribar un avión (drone) espía estadounidense en la rica región petrolera.
Estas declaraciones significan un cambio drástico en la dialéctica de Trump, quien días atrás había restado importancia a la gravedad de los presuntos ataques a dos petroleros en el Golfo de Omán la semana pasada, descartando esencialmente la idea de que los eventos recientes desencadenarán una guerra con Irán.
Horas antes, funcionarios estadounidenses dijeron que un misil tierra-aire iraní derribó el avión no tripulado de vigilancia militar sobre el Estrecho de Ormuz, sin embargo Irán dijo que el avión estaba sobre su territorio.
“Los informes iraníes de que el avión estaba sobre Irán son falsos”, dijo el Comando Central de los Estados Unidos en un comunicado. “Este fue un ataque no provocado contra un activo de vigilancia estadounidense en el espacio aéreo internacional”.
El WTI subió más del 5%, a u$s 56.59 por barril, mientras que el crudo Brent saltó 4% hasta los u$s 64.26, tras las declaraciones del Presidente estadounidense, así como tambien lo hizo el oro alcanzó un máximo de u$s 1,397.70, su nivel más alto desde el 5 de septiembre de 2013, cuando se negoció por última vez a u$s 1,400.
Por su parte, Irán dijo que su Guardia Revolucionaria había derribado un avión no tripulado estadounidense que volaba sobre territorio iraní, días después de que Estados Unidos acusó a Irán de derribar un avión no tripulado que volaba hacia el Golfo de Omán luego de los informes de ataques contra dos petroleros.
Esta es la última novedad de escalada entre Estados Unidos e Irán que comenzó a acelerarse a fines de mayo, luego de que cuatro petroleros supuestamente fueron atacados frente a las costas de los Emiratos Árabes Unidos.
Si bien los incidentes y la mayor tensión entre Washington y Teherán no tuvieron mucho efecto en los precios del petróleo, lo ocurrido con estos últimos eventos esta produciendo un drástico giro hacia un mercado alcista. Dado que estos ocurrieron cerca del punto más importante del flujo de petróleo en el mundo, el Estrecho de Ormuz, podrían tener un impacto duradero en el precio del petróleo, ya que los propietarios de barcos, los corredores marítimos, las aseguradoras y las reaseguradoras ya están elevando las primas para asegurar que los petroleros que pasan por la región y están cobrando tarifas de flete más altas para el envío de petróleo desde Medio Oriente.