(Depetroleo-Gonzalo Díaz). La semana pasada, durante la reunión celebrada por la OPEP y sus aliados, se pudo observar el claro protagonismo de dos naciones: Arabia Saudí y Rusia, una alianza estratégica que llevará al futuro del mercado petrolero a un nuevo nivel. A medida que transcurren los días y nuevos informes que hemos ido presentado, la cooperación entre las dos superpotencias energéticas mencionadas, sumará a otros países productores a crear una organización más amplia y con más fuerza que la OPEP, que ha ido perdiendo relativa fuerza en el concierto del mercado internacional del crudo con el advenimiento ascendente de Estados Unidos, Canadá y Brasil.
El camino, cada vez evidente, del que Rusia está llamado a ser un jugador cada vez más importante y permanente, más allá de la coyuntura diplomática actual por acordar pactos y acuerdos de productividad y bombeo de crudo, la creación de la SUPER OPEP sería una organización que dará mayor poder de voto a los pesos pesados del petróleo en detrimento de los productores más modestos.
Mientras la cúpula ministerial del cartel, se apresta para futuras reuniones, distintas disputas históricas subyacen entre algunas protagonistas menores, como Venezuela, Irak e Irán; no obstante, Rusia que no es miembro de OPEP, ha logrado crear en dos años una coalición de 24 productores llamada OPEP+.
El ministro de petróleo de Rusia, Alexander Novak, expresó recientemente que "tenemos que basarnos en nuestro modelo exitoso de cooperación e institucionalizar su éxito a través de un marco estratégico más amplio y permanente".
La evaluación de la creación de un grupo conformado por 24 Estados petroleros para integrar una organización permanente con su propia constitución y secretaría, sería el objetivo a lograr, de acuerdo a trascendidos e información propia. Esto constituirá un cambio radical en el orden mundial petrolero y aunque probablemente no logre reemplazar a la OPEP, este hecho sería el principio del fin del cartel que ha dominado la producción de petróleo durante décadas.
Los candidatos a formar parte de la nueva estructura complementaria a la OPEP, son: Rusia, México, Kazajistán, Azerbaiyán, Bahrein, Brunei, Malasia, Omán, Sudán, y Sudán del Sur. Al respecto, la novedad radicará en que el hecho de el voto de cada miembro será proporcionado a su capacidad de productividad. Y en el nuevo grupo, los más grandes productores, como Arabia Saudita y Rusia, posiblemente tendrán más poder político de decisión.La agrupación SUPER OPEP, podrá fácilmente superar las instancias tradicionales del cartel, y a su vez, finalmente establecer un vínculo más estecho entre Moscú y Riyadh, y con más poder para enfrentar a Estados Unidos en su lucha por el dominio del mercado internacional del petróleo.