Planea invertir en 2019 alrededor de 400 millones de dólares en 30 pozos y una nueva planta de producción. Martin Lawrence, CEO de Shell para America Latina, dijo estar “muy optimista” por los resultados en los no convencionales en la Argentina.
La petrolera anglo-holandesa Shell planea pasar a la etapa de producción masiva en la formación Vaca Muerta. Para esto, invertirá 400 millones de dólares en la Cuenca Neuquina solo el año que viene. La decisión la tomará el directorio general de la compañía en unos dos o tres meses. Así lo adelantó a EconoJournal el CEO de Shell para America Latina, Martin Lawrence.
En lo planes de la petrolera está elevar fuertemente la producción de shale gas y shale oil en la Argentina. “Veo al desarrollo de Vaca Muerta más adelantado. Observamos muy buenos resultados en nuestro piloto, donde inauguramos una planta el año pasado. Cada pozo que perforamos está en línea con nuestras expectativas. Estamos muy cerca de tomar la decisión en unos meses de ir por el proceso de desarrollo”, explicó Lawrence.
En este sentido, Shell está ampliando la planta de Sistema de Producción Temprana (Early Prouduction Facilitiy – EPF), que es una planta de tratamiento temprano de petróleo. El objetivo es tenerla terminada para fin de año y llevar su capacidad producción de 10.000 a 12.000 barriles/día (b/d).
El play de la compañía en Vaca Muerta cuenta con una serie de áreas que despiertan mucho interés, como son Sierras Blancas, Cruz de Lorena, Águila Mora, Rincón Ceniza, La Escalonada, Coirón Amargo Sur Oeste y Bajada de Añelo.
En los próximos meses, la petrolera que en el país está conducida por Teofilo Lacroze, prevé tomar la decisión de lanzar la construcción de una segunda planta para llegar a los 30.000 barriles. “Estamos en el momento de la ingeniería”, contó Lawrence, y agregó que “sumando todo alcanzaremos los 42.000 barriles para el año 2020”.
Si el directorio general de la empresa aprueba -tal como planea- en los próximos meses el lanzamiento de la fase masiva en Vaca Muerta, Shell invertirá alrededor de 300 millones de dólares en perforación y completación de 30 pozos, más la construcción de la segunda planta, donde alcanzaría los 400 millones de dólares de inversión en Vaca Muerta en 2019. Los cálculos de la petrolera se ubican entre 10 y 12 millones de dólares el costo de cada pozo.
Lawrence señaló que “este año logramos en Vaca Muerta perforar un pozo por 4 millones de dólares. Ahora tenemos que completar ese pozo. Creemos que este año vamos a lograr alcanzar los 10 millones de dólares por pozo”.
Sobre la producción recuperada a largo plazo de un pozo, subrayó que “creemos que vamos a alcanzar entre 1 y 1,5 millones de barriles equivalentes. (Econojournal)