(EFE).- El precio del petróleo intermedio de Texas (WTI) abrió ayer martes con una bajada del 0,5 %, hasta los 42,67 dólares el barril, en una jornada en la que los operadores están pendientes de los datos sobre la evolución de las reservas de crudo de EE.UU. y de la reunión que mantendrá mañana la Organización de Países Exportadores de Petróleo y sus socios (OPEP+).
A las 09.06 hora local (13.06 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en septiembre restaron 0,22 dólares respecto al cierre de la sesión previa del lunes.
El barril de referencia estadounidense retrocedía a la espera de la publicación de las estimaciones preliminares del Instituto Estadounidense del Petróleo (API en inglés), que darán pistas al mercado sobre los niveles de demanda, que se encuentra en proceso de recuperación tras los meses más complejos de la pandemia del coronavirus.
Además, los inversores miran hacia la OPEP+ y la reunión que este grupo celebrará mañana y donde en principio no se esperan grandes cambios en la política de ajustes de producción después de que en agosto el recorte haya pasado de 9,7 millones de barriles por día (bpd) a 7,7 millones de bpd.
"Sobre la reunión de mañana (por hoy miércoles) esperamos que la OPEP + solicite a sus miembros un cumplimiento estricto y aplauda el éxito de las medidas hasta la fecha", expresó en una nota el analista de mercados petroleros de Rystad Energy, Bjornar Tonhaugen.
Este expertos añadió además que "es probable" que la OPEP+ traslade su preocupación sobre la situación de los almacenes mundiales, que están tardando más de lo esperado en ver algún alivio material.
Tonhaugen también apunta a que otro motivo de inquietud es la recuperación de precios, que esperaban algo más rápida, pero que no se ha sostenido en el nivel tiempo al ritmo esperado por la persistencia de la pandemia.
