La Unión Industrial Argentina (UIA) consideró que sostener el ritmo de crecimiento para el resto del año dependerá de la evolución de la situación sanitaria, la campaña de vacunación y el impacto de las recientes medidas para contener el avance de la segunda ola de la pandemia.
De acuerdo con un informe del Centro de Estudios de la UIA (CEU), "la industria continuará operando bajo estrictos protocolos pero aún así el sector sigue alcanzado por un conjunto de nuevos costos y dificultades ocasionadas a lo largo del 2020 que inciden en el desempeño productivo".
El CEU remarcó que "se trata de los nuevos costos por el elevado ausentismo, la implementación de testeos, el costo de traslado del personal y el clima de incertidumbre macroeconómica. En este marco, la recuperación del empleo asalariado en la industria sigue siendo débil".
La entidad fabril reveló además que "en febrero, la actividad industrial tuvo una caída interanual de -5,2% y de -0,8% en la medición desestacionalizada con respecto al mes anterior".
"Se trató de una caída luego del buen desempeño de los meses anteriores asociada a factores como paradas de plantas, vacaciones y una mejor base de comparación. De acuerdo con datos disponibles, la situación se revirtió en marzo donde se compara contra el comienzo del aislamiento social preventivo y obligatorio", indicó el documento.
La UIA puntualizó que "la caída del mes obedeció al desempeño de sectores que venían con buenos datos de producción y que atravesaron situación puntuales en febrero", entre los que se encuentran el Automotor (-16,5%), vinculado a los pocos días de actividad del sector por vacaciones y paradas de planta por readecuaciones en las líneas de producción.
Por otro lado, Metales básicos se encontró en una situación parecida registrando una caída de -10,5% por paradas de planta por vacaciones y mantenimiento.
Sustancias y productos químicos también registró una caída por paradas de planta (-7,7%) en químicos básicos y materias primas plásticas mientras que la producción de pinturas y productos de limpieza se mantuvo en aumento.
El sector de Alimentos y bebidas registró una leve caída con respecto del mismo mes del año anterior (-1,7%), con cierta heterogeneidad. Por un lado, la molienda de oleaginosas, los lácteos y la yerba, entre otros, impulsaron el indicador al alza, mientras que por el otro la carne vacuna, la carne aviar, la producción de harina de trigo y el vino lo hicieron a la baja.
La UIA remarcó que "el sector continúa afectado por la vigencia de precios máximos y crecientes controles a la actividad. Finalmente, persisten sectores que mantienen variaciones negativas".
Este es el caso de Refinación de petróleo (-19,9%) afectado principalmente por la contracción de producción de aerokerosene, vinculada a las restricciones en los vuelos, y Papel y cartón (-4,5%) debido a la fuerte caída en producción de papeles de impresión (-39,5%), compensado por el aumento de papel tissue (+4%) vinculado el incremento en la demanda por la pandemia.
Continuaron con buenos datos el sector de Minerales no Metálicos (+22,5%) que registró el séptimo aumento interanual consecutivo y Metalmecánica (+3,5%) que registra incrementos por sexto mes consecutivo.
Los primeros datos de marzo anticipan un nuevo crecimiento de la producción, teniendo en cuenta las subas de producción de vehículos (+125,2%), datos de la construcción (despachos de cemento: +93,5%), consumo de energía eléctrica de grandes usuarios industriales (+26,5%) y un nuevo aumento de las exportaciones hacia Brasil (+11,8%).
En parte estos datos se vieron impulsados por la baja base de marzo de 2020, cuando la producción registró el impacto de las medidas de aislamiento en la segunda quincena del mes.