El precio del petróleo volvió a operar en alza, confirmando que el proceso de recuperación de la demanda mundial están en marcha apoyado en signos de repunte en los indicadores económicos de los Estados Unidos.
El barril de la variedad WTI subió 0,3% para cerrar en 63,40 dólares, mientras que el tipo Brent ganó 0,4% y concluyó en 66,80 dólares, según cifras proporcionadas por la agencia Bloomberg.
Los futuros en Nueva York subieron poco a poco junto con un repunte del mercado más amplio, con los precios operando en los niveles máximos del último mes.
Las solicitudes de desempleo en EE.UU. cayeron a un nuevo mínimo de la era de la pandemia, mientras que las ventas minoristas en el país se aceleraron al máximo en 10 meses.
El aumento de las vacunas y la disminución de los temores sobre la pandemia le están dando al mercado una buena oportunidad de tener un aumento de precios constante.
El petróleo se mantiene firmemente por encima de su rango de precios de las últimas semanas cuando se había estancado cerca de los 60 dólares el barril desde mediados de marzo, ya que algunas regiones enfrentaron un resurgimiento de casos de virus. Los signos continuos de un mercado estadounidense más fuerte también están empujando los precios al alza.
En la última semana, la cantidad de millas recorridas por las carreteras interestatales del país aumentó en comparación con el mismo período en 2019 por primera vez desde que comenzó la pandemia.
Si la demanda aumenta considerablemente, los productores podrían bombear más crudo y poner fin a los recortes. No puede pasar demasiado tiempo ya que a estos niveles de precios, la producción de esquistos se vuelve más rentable y atractiva y los países de la OPEP+ enfrentarían una mayor competencia..
Sin embargo, existen razones para ser cautelosos. La pandemia está arrasando en países como India, que registró su mayor aumento en un día de nuevos casos desde que comenzó la pandemia.
Otro punto de fricción es Irán, que busca revivir el acuerdo nuclear de 2015 y salir de las sanciones impuestas por Occidente y que podría allanar el camino para el regreso al mercado del crudo.
El panorama de la demanda en Europa también es tambaleante por la nueva ola de infecciones.
Por su parte, el oro confirmó su repunte debido a la debilidad del dólar frente a una canasta de monedas y subió 1,7% para cerrar en 1.765 dólares la onza.