Irán rechazó ayer la oferta de Arabia Saudí para limitar su producción a cambio de que Riad recortara el suministro, acabando con las esperanzas del mercado de que los dos mayores productores de la OPEP se comprometieran esta semana en un acuerdo que ayudara a aliviar la situación de oferta de crudo a nivel mundial.
"La brecha entre los países de la OPEP se está estrechando. Pero no espero que vaya a salir un acuerdo de la consulta de mañana", apuntó el ministro de Energía Saudí, Khalid al-Falih. Anteriormente, el ministro de Petróleo iraní, Bijan Zanganeh, había declarado que "no es el momento para tomar decisiones", y emplazó la posibilidad de llegar a un acuerdo a la reunión de la Organización de Países Exportadores de Petróleo del 30 de noviembre en Viena. "Trataremos de llegar a un acuerdo en noviembre", indicó Zanganeh.
A las 14.00 horas (GTM) los miembros de la OPEP y Rusia se reunirán en el Foro Internacional de la Energía, en lo que se había previsto como una reunión de la que podrían salir medidas para paliar la sobreoferta de crudo actual.
Los precios del petróleo cotizan a menos de la mitad que en junio de 2014 debido, precisamente, al exceso de oferta, lo que ha provocado que la OPEP y Rusia estén intentando buscar medidas para reequilibrar el mercado y así impulsar los ingresos por exportaciones de petróleo y ayudar a sus mermados presupuestos.
La idea predominante desde principios de 2016 entre los productores es llegar a un acuerdo para congelar los niveles de producción, a pesar de que los analistas consideran que no serviría para reducir los barriles no deseados.
El acuerdo se ha complicado por la rivalidad entre Irán y Arabia Saudí, que está involucrada en varios conflictos bélicos, incluidos Yemen y Siria, en los el país persa tiene intereses encontrados.
Varias fuentes aseguraron a Reuters que Arabia Saudí habría ofrecido a Irán reducir su producción si éste último congelaba la suya. Sin embargo, esta propuesta ha sido rechazada, a pesar de los esfuerzos de Rusia, Qatar y Argelia por mediar entre los país, y Riad ha cambiado de posición.
"Hay un movimiento hacia delante, pero ellos (OPEP) no tienen intención de llegar a la meta", indicó el ministro de Energía ruso, Alexander Novak, después de reunirse con sus homólogos árabe e iraní. Novak y Falih aseguraron que aún era posible un acuerdo a finales de año. La posición de Irán no se dio a conocer.
Irán ha visto como su producción se estancaba en los 3,6 millones de barriles al día, y sigue insistiendo en su derecho a aumentar la extracción hasta los 4,1-4,2 millones de barriles diarios, mientras que los miembros de la OPEP del Golfo quieren que la mantenga por debajo de los cuatro millones de barriles.(E16)