(Depetroleo-Gonzalo Díaz). La compañía ExxonMobil informó hoy en un comunicado de prensa, que está impulsando un desarrollo petrolero a largo plazo en el bloque Bajo del Choique-La Invernada en Vaca Muerta, y se espera que el proyecto produzca hasta 55.000 b/d dentro de cinco años e incluirá 90 pozos, en una instalación de producción central y de infraestructura de exportación conectada al oleoducto y refinerías de Oldeval.
Hasta la fecha, hay tres pozos listos para comenzar la producción comercial en el sitio, así como tres pozos de exploración. Exxon, a su vez, tiene a Qatar Petroleum como socio minoritario en el proyecto.
El bloque que Exxon ubicado en la Cuenca Neuquina, recientemente ha visto mucha actividad de las compañías de petróleo y gas. Si todo va según lo planeado, una nueva expansión de la producción estaría en orden, para llevar la producción total del bloque a 75.000 barriles de petróleo equivalente diariamente.
"Nos sentimos alentados por los excelentes resultados de nuestro proyecto piloto de Neuquén y esperamos un aumento en la producción a través de esta importante expansión", dijo Staale Gjervik, vicepresidente senior de no convencionales de ExxonMobil.
Además de Exxon se encuentran entre las compañías como BP, Total y Chevron que ya han prometido fondos sustanciales para la exploración y producción de petróleo y gas en Vaca Muerta, que tiene reservas estimadas de unos 22.8 mil millones de barriles de petróleo.
"ExxonMobil ha sido un jugador activo en la cuenca de Neuquén desde 2010 y en Argentina por más de 100 años", dijo Daniel De Nigris, el principal gerente de país de ExxonMobil.
En tanto que la Secretaria de Energía estima que Vaca Muerta logre un aumento planificado en la producción nacional de petróleo y gas a 1 millón de bpd de crudo y 260 millones de metros cúbicos de gas para 2023. Eso implicaría un aumento de las exportaciones a 500.000 bpd de Crudo y 80 millones de metros cúbicos de gas.
No obstante, es para destacar que, la actual infraestructura argentina, incluidos los ferrocarriles, las carreteras y los oleoductos, es insuficiente para respaldar el ambicioso plan energético del gobierno. El desarrollo de la infraestructura es primordial en Argentina y necesita abordar “la conectividad ferroviaria o vial limitada o inexistente”, y en ese sentido la escasez de carreteras, oleoductos y ferrocarriles adecuados amenaza con crear cuellos de botella que mantendrían petróleo y gas fuera de los mercados. Numerosas empresas extranjeras de petróleo y gas han citado las posibles limitaciones de capacidad como razones de su postura cautelosa de inversión.