(Depetroleo-Gonzalo Díaz). El enviado especial de EEUU para Venezuela, Elliott Abrams (imagen de portada), dijo recientemente a la agencia de noticias Efe que su gobierno instó a China y a empresas petroleras de todo el mundo a cortar lazos económicos con el Ejecutivo del presidente venezolano, Nicolás Maduro, sobre el que pesan numerosas sanciones.
Abrams explicó ante medios de prensa, que él mismo se reunió con el embajador chino en EEUU, Cui Tiankai, y que, además, el embajador estadounidense en China, Terry Branstad, ha mantenido varios encuentros con representantes del país asiático sobre la relación económica entre Pekín y Caracas.
“Hemos tenido conversaciones con China sobre sus relaciones económicas y financieras con Venezuela. Y el mensaje principal ha sido muy simple: tenéis inversiones, comercio y préstamos que nunca vais a recuperar. Ese régimen está destruyendo la economía de Venezuela“, manifestó el funcionario estadounidense.
En concreto, Washington ha aconsejado a empresas petroleras de todo el mundo que corten lazos con Maduro porque podrían venir “más sanciones” por parte de EEUU.
China es el principal acreedor de Maduro, en la última década le ha prestado casi u$s 62.000 millones, de los que un tercio (u$s 20.000 millones) aún está pendiente de pago, según una base de datos de la Universidad de Boston y el centro de pensamiento Diálogo Interamericano.
EEUU era el primer comprador de petróleo de Venezuela, pero en enero la administración Trump impuso sanciones a la compañía estatal Petróleos de Venezuela (PDVSA), de manera que el gobierno de Maduro dejó de recibir esos ingresos, que se habían convertido en una de las principales fuentes de divisas para las arcas del Estado venezolano.
El Gobierno de Maduro paga actualmente con petróleo parte de esa deuda a China, nación que en 2018 era su tercer comprador de crudo (por detrás de EEUU y la India) con unos 332.000 barriles al día.