(Depetroleo-Gonzalo Díaz). El Fondo Monetario Internacional recortó su pronóstico de crecimiento global una vez más, prediciendo que el crecimiento económico caerá a su tasa más débil desde la crisis financiera de hace una década.
El FMI dijo que la economía mundial está en una "desaceleración sincronizada" y que solo se expandirá en un 3% este año. En un momento el año pasado, el FMI pronosticó un crecimiento de 3.9% para 2019. "El crecimiento continúa debilitado por las crecientes barreras comerciales y las crecientes tensiones geopolíticas", dijo el Fondo en un comunicado.
"Estimamos que las tensiones comerciales entre Estados Unidos y China reducirán acumulativamente el nivel del PIB mundial en un 0,8 por ciento para 2020". Hay problemas específicos de cada país en los mercados emergentes (Argentina, Irán y Turquía, por ejemplo), pero el mundo también Enfrentando problemas estructurales, como el bajo crecimiento de la productividad y el envejecimiento demográfico, agregó el FMI.
Una dramática desaceleración en el comercio y la manufactura ha forzado varias rebajas consecutivas en las predicciones del PIB. Además, varias minas geopolíticas podrían empeorar las cosas. La guerra comercial entre Estados Unidos y China es muy impredecible y podría deteriorarse nuevamente, mientras que el desastre del Brexit aún podría estallar y descarrilar la economía europea.
El problema para la economía global es que una vez que las cosas comienzan a desacelerarse, hay un efecto compuesto negativo que podría atrapar al mundo hacia un crecimiento más lento. Otro golpe al crecimiento de, por ejemplo, un Brexit sin acuerdo o más barreras comerciales podría ser "un cambio brusco en el sentimiento de riesgo, interrupciones financieras y una reversión en los flujos de capital hacia las economías de mercados emergentes", dijo el FMI. "En las economías avanzadas, la baja inflación podría arraigarse y restringir el espacio de la política monetaria en el futuro, limitando su efectividad".
Esto ayuda a explicar el pesimismo que domina el mercado petrolero en este momento, que está eclipsando enormemente una imagen más matizada de los fundamentos. Mientras tanto, la producción de esquisto estadounidense se ha estancado este año, poniendo fin a años de crecimiento explosivo.
Sin embargo, incluso con riesgos geopolíticos significativos para los suministros en el Medio Oriente y una desaceleración del sector del esquisto de EEUU, los precios del petróleo no han logrado recuperarse de manera significativa. Brent comenzó esta semana por debajo de u$s 60. El debilitamiento de la economía mundial es la principal preocupación en este momento.