La licitación del Plan de Promoción de la Producción de Gas se llevará a cabo entre la última semana de noviembre y la primera de diciembre, lo que permitirá "recuperar rápidamente el declino de producción el invierno que viene", e incluso demandar menos importaciones de Gas Natural licuado (GNL), según lo adelantó el secretario de Energía, Darío Martínez.
En una entrevista con Télam, Martínez también aseguró que el Gobierno trabaja en "un esquema de largo plazo" para el desarrollo de Vaca Muerta, ratificó un plan de inversiones por US$ 600 millones para incrementar la capacidad de la red de gasoductos, y reiteró el interés de llegar con el gas a Brasil.
Los siguientes son los tramos principales de la charla;
Télam - ¿El nuevo Plan GasAr llegará a tiempo a recuperar la producción para el próximo invierno y evitar mayores importaciones de GNL?
Darío Martínez - El decreto más allá del circuito interno, no está atrasado. Queremos licitar entre la última semana de noviembre y la primera de diciembre, ése es el plazo que nos hemos propuesto, y por supuesto que vamos a frenar el declino ya en el invierno que viene.
Ahora este plan tiene como objetivo producir en cuatro años 30.000 millones de metros cúbicos (mmm3) de gas argentino, nos va a generar un ahorro fiscal de US$ 2.500 millones, un ahorro en divisas de US$ 9.200 millones. Esto no significa que dejemos de importar energía, pero sin dudas vamos a necesitar menos GNL que este año. Por supuesto está en nuestra proyección y objetivos ir aumentando la producción de gas pero tenemos problemas de evacuación del mismo. En la cuenca que más porcentual va a aportar al esquema que es la cuenca neuquina, vamos casi a tope de la capacidad de evacuación. No podríamos producir más ahí porque no tenemos cómo sacarlo. Lo tenemos en carpeta, pero son las limitaciones que tiene cualquier plan de estímulo y esta es una importante.
T- ¿Más allá del plan están trabajando en las obras de infraestructura para un desarrollo masivo de Vaca Muerta ?
- Para este plan de estímulo lo que necesitamos es un bloque de 70 mmm3 diarios, después pedimos que la sostengan, y así cierra con la capacidad de transporte actual y lo hicimos en función de eso. Ahora, hay un gran desafío de aumentar la producción y tiene que ver con un esquema a mas largo plazo que trabajamos para lograr definitivamente dejar de importar. Como parte de eso le pedí al embajador (Daniel) Scioli que analice la industria brasileña y ver qué contrato se puede lograr a largo plazo, viendo que en el declino de Bolivia, tenemos una oportunidad para la inversión que justifique este caño.
También esperamos reunirnos con las nuevas autoridades de Bolivia y ver el esquema con ellos. Y vamos a hacer varias inversiones para aumentar la capacidad de los gasoductos existentes en unos 10 mmm3 adicionales por unos US$ 600 millones. Vamos a ir manejando las prioridades, viendo los contratos que podemos llegar a cerrar.
T- ¿Qué va ocurrir con el barril criollo con precios que se mantienen por encima de los US$ 40 pero también con necesidades fiscales de las provincias?.
DM - El tema lo tengo siempre presente pero a los precios que está hoy el petróleo no hay gobernador que lo esté planteando. Yo quiero mantener una reunión con la Ofephi (Organización Federal de Estados Productores de Hidrocarburos), pero no es un tema de todas las provincias productoras. No hay que olvidar que el precio sostén tenía un componente muy importante para las productoras que es la baja a cero de las retenciones y esa parte está vigente, con lo cual a un barril a US$44 y US$45 hay una gran ventana de oportunidades para la exportación de crudo.
Ahí el tema es cómo asegurar la provisión del mercado local, en términos de equilibrio, de ser equitativos y que no impacte en la macro ni en la vida de los argentinos. Si seguimos generando este proceso de confianza y reglas claras hay una grandísima oportunidad.
T - ¿Estos esquemas de incentivo, cómo impactan en los intereses de YPF y su rol en el mercado?
- En materia de hidrocarburos YPF es quien marca el rumbo, pero también es notorio que por un momento lo perdió, se desenfocó, quedó muy complicada financieramente y endeudada. Fue muy mal administrada y de hecho en el caso de la resolución 46 que era un esquema muy ventajoso para producir gas, la que más sabia del tema estaba mirando para otro lado. A veces estaban más preocupados en pelearse con una pyme y sacarle un contrato mientras les pasaba un elefante blanco por al lado. Nos preocupa su situación pero también nos ocupa, no para beneficiar a YPF sino para tener un esquema donde se empiece a producir gas y petróleo argentino, porque debe tener todos los objetivos en producir gas, petróleo y combustibles, y en los últimos años lo perdió.
T- Llega el verano con una realidad social distinta por la pandemia. ¿Qué esperan ocurra con la prestación del servicio eléctrico?
DM - Que hay cortes de energía en la Argentina no lo descubrí yo, vamos a trabajar para que haya menos, pero también debo decir que no lo vamos a resolver este verano. Para eso no hay que estar atento como en los últimos años sólo a discutir la tarifa, sino ver el plan de inversiones y luego hacer que se cumpla. Eso no nos puede pasar. Ya estamos tomando algunas decisiones, y hay una deuda con las distribuidoras que queremos cubrir con una asignación determinada para las obras que el ENRE va a decir cuales son para bajar los cortes. Esta falta de control en las inversiones durante muchos años requiere también de varios años, pero con mejores controles y asegurando que las inversiones se hagan.