El Departamento de Energía de Estados Unidos liberará 500.000 barriles de crudo de sus reservas estratégicas, en respuesta a los efectos de la tormenta tropical Harvey, en la primera medida de este tipo desde 2012, dijo el jueves una portavoz en un comunicado.
Los barriles liberados serán enviados a la refinería Phillips 66 (PSX.N) situada en Lake Charles, en Luisiana, según el comunicado. La planta no ha sido afectada por la tormenta, que ha azotado durante varios días la costa estadounidense del Golfo de México.
La medida incluye la liberación de 200.000 barriles de crudo dulce y 300.000 de barriles de petróleo amargo, de acuerdo al comunicado. Las reservas, establecidas en la década de 1970, actualmente cuentan con 679 millones de barriles.
Reuters
