Una situación de extrema tensión se produjo a media tarde de ayer en el acceso norte de esta ciudad, donde un escuadrón de élite de la Gendarmería Nacional se apostó a escasos metros de los ex obreros de la empresa constructora CPC que, por segundo día consecutivo, bloqueaban la ruta nacional N° 3, esta vez en la rotonda que da frente a la playa de tanques de almacenamiento de petróleo.
Ayer, a poco de volver a otro sitio de la ruta, alrededor de las once de la mañana se enteraron que en sus cuentas bancarias les habían acreditado indistintamente sumas que iban de los 12 a los 18 mil pesos, sin que se discriminara por qué concepto.
De todos mondos, como las cifras eran muy inferiores a las que reclamaban, decidieron mantener el bloqueo, aunque de manera flexible, ya que permitían el constante paso de vehículos particulares; para camiones y colectivos lo liberaron por algunos minutos alrededor de las 13:00.
Cerca de las 14, parte del escuadrón de gendarmes se apostó a pocos metros de los manifestantes, en tanto que otra sección aguardaba en las inmediaciones.
Lejos de amedrentarse, los desocupados se quedaron en la ruta y algunos acopiaron piedras, dispuestos a enfrentar a los gendarmes. Minutos después llegaron oficiales de la Dirección Regional Zona Norte de la Policía Provincial, uno de los cuales comunicó a los obreros la resolución dictada por la juez federal Marta Yáñez por la cual se les informaba oficialmente del delito de cortar una ruta nacional y se los intimaba a dejar libre al menos un carril de circulación.
Finalmente, pese a que algunos obreros se mostraban reticentes a dejar la ruta, policías y gendarmes lograron habilitar inicialmente un carril y luego, a medida que los obreros se iban retirando, las dos manos quedaron liberadas alrededor de las 15:00, aunque no se descartaba que hoy los desocupados pudieran retomar la medida de fuerza.(LOA)