Este fenómeno se repitió tanto a nivel provincial como a nivel nacional. En el caso de Santa Cruz, de enero a noviembre la producción de petróleo cayó 8%, pero la del gas subió 1,5%. En 2017 aún es incierto el impacto que tendrá en la producción la decisión de abandonar el barril criollo y unificar los valores con el mercado internacional.
En el mes de noviembre, a nivel nacional, los números oficiales consolidan la tendencia mostrada en el resto del año: se produjo un 3,8% menos de petróleo y un 4,5% más de gas en los primeros once meses del año pasado.
La producción de petróleo cayó un 5,5% interanual en noviembre y la de gas natural creció un 1,3% en ese mes, según reconstruyó ayer la consultora Economía & Regiones (E&R) en su Informe Energético, basado en datos del Ministerio de Energía y Minería de la Nación.
En el décimo primer mes del año pasado, la producción de petróleo totalizó 2.394.217 de metros cúbicos (m3), un 1,7% menos que en octubre. En el acumulado de 2016, se produjeron 27.269.755 m3, que representa una baja de 3,8% respecto al mismo período de 2015.
En el caso del petróleo, la producción cayó en noviembre en todas las jurisdicciones y solamente registró un aumento en el acumulado del año en Mendoza: 1,5%.
“En las principales provincias productoras, el mes de noviembre dejó caídas interanuales en Chubut (-6,9%), Santa Cruz (-8,2%) y Neuquén (-2,9%)”, precisó E&R.
El procesamiento de petróleo, en tanto, descendió 3,6% en noviembre frente al mismo mes del año anterior, y en el acumulado anual bajó 4,7%.
La caída de los once meses se relaciona con la performance de las principales empresas, que representan el 99,5% del total refinado en el período: YPF (-2%), Shell (-5,9%) Esso (-5,4%), Petrobras (-11,6%), Oil Combustibles (-13,3%) y Refinería del Norte (-10,9%).
Pese a los retrocesos en materia de producción y refinamiento, las ventas de combustibles crecieron en noviembre de 2016 un 1% interanual -con subas en gasoil ultra (16%), nafta común (45%), nafta súper (2%) y nafta ultra (8%)- y si bien en el acumulado anual no se presentaron variaciones respecto de 2015, el propio dato da cuenta del impacto de la importación del crudo en perjuicio del petróleo nacional.
Gas natural
En tanto, la producción de gas natural llegó en noviembre a los 3.636.997 de milímetros cúbicos (mm3) y acumuló 41.223.468 mm3, una cifra 4,5% mayor que en el mismo lapso del año anterior. Según la economista Valeria Sandoval, de E&R, los aumentos interanuales que se registran desde diciembre de 2014 se deben al Plan Gas, que fomenta la producción.
Entre las principales jurisdicciones productoras hubo aumentos en Santa Cruz en el acumulado interanual del 1,5%, Neuquén (6,9%), Tierra del Fuego (26,3%) y Río Negro (8,3%).
“El importante incremento en Tierra del Fuego se relaciona con la puesta en marcha del yacimiento Vega Pléyade, mientras en sentido contrario se presentaron descensos del Estado nacional (-0,8%), Chubut (-0,9%), Salta (-6,1%) y Mendoza (-6,8%)”, concluye el informe de E&R.
Pese a que de enero a noviembre la producción de gas creció levemente en Santa Cruz, como ya se explicara párrafos antes (1,5%), lo cierto es que en el mes de noviembre, tal como ocurrió en la provincia de Chubut, se registró una caída en la producción de gas del 3,2%.
Energía
Por otro lado, la demanda de energía eléctrica en noviembre de 2016 alcanzó los 10.087.285 de megavatios por hora (MWh) y cayó un 0,9% interanual, debido, principalmente, al fuerte descenso en el consumo de los grandes usuarios del Mercado Eléctrico Mayorista (MEM): 8,2%. Sin embargo, en el acumulado del año tuvo una variación positiva del 0,9%.
La generación neta de energía (sin considerar consumos internos), en cambio, tuvo una suba del 3,8% interanual en noviembre y llegó a los 10.481 gigavatios por hora (GWh). La generación térmica, que explica el 62,1% del total, aumentó un 4,7% interanual y completó el sexto mes seguido al alza. La generación hidráulica, con una participación del 29,7% en el mercado se incrementó un 3,2% en ese mes y cortó cinco meses consecutivos con bajas de alrededor del 30%. La generación nuclear, con una participación del 6,1%, creció 4,1% interanual. En tanto, la generación de energías renovables sólo representó 226 GWh, un 2,2% del total en el undécimo mes de 2016 y se encuentra aún muy lejos del objetivo del 8% para fines de 2017. Por eso, el Ministerio de Energía apura los contratos para el programa RenovAr, que ayudará a cumplir con esta meta.
Los precios
Cabe recordar que el Gobierno cerró con las petroleras un acuerdo a fines de la semana pasada para eliminar el barril criollo y converger escalonadamente hacia junio de este año con los precios internacionales.
Esto repercutirá, por un lado en el nivel de regalías que perciben las provincias. Para Santa Cruz significará un descenso de entre el 10 y 12%, dependiendo de cómo cotice el crudo de Brent (elegido como valor de referencia) para entonces.
En la jornada de ayer, los precios del petróleo internacional se mantuvieron en alza en el caso de Nueva York, ayudados por la debilidad del dólar y el reiterado compromiso de aplicar los acuerdos para limitar la oferta de crudo.
En el New York Mercantile Exchange (Nymex), el petróleo de Texas (WTI) para entrega en febrero asciende un 1,7% a US$ 53,26. No así en el mercado de futuros de Londres, dónde en una jornada muy volátil, el barril de petróleo Brent para entrega en marzo cerró en US$ 55,47, un 0,69 % menos que al término de la sesión anterior.
La semana pasada, el crudo cayó un 3% tras cifras decepcionantes de la actividad comercial en China, gran consumidor de oro negro, desviando de forma temporal al mercado de sus especulaciones sobre la disminución de la oferta emprendida por varios países productores.
Si bien el principio de la semana estuvo marcado por fuertes fluctuaciones de precios, el mercado se acercaba al fin de semana en un ambiente tranquilo, pero con un tono bastante sombrío.
China registró una caída en su comercio exterior en 2016, las exportaciones y las importaciones presentan un fuerte descenso y confirman la desaceleración del gigante asiático, el segundo mayor consumidor de petróleo después de Estados Unidos.
La caída de la demanda también estuvo acompañada por la entrada en vigor de los acuerdos entre los principales países productores, tanto de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), como los que están fuera de ella. Ambos acuerdos establecen la disminución de la producción a nivel mundial, lo que permitió recuperar la tendencia alcista en los precios del barril de crudo. (LOA)