(Depetroleo-Gonzalo Díaz). El pasado viernes, el presidente Jair Bolsonaro anunció la destitución de Roberto Castello Branco, CEO de Petrobras, luego de semanas de severas críticas por parte del mandatario al incremento de los precios del combustible mientras su administración trabaja por rebajar los impuestos(1).
Oportunamente, Petrobras y su director ejecutivo han estado pidiendo aumentos en los precios del diesel y la gasolina para reflejar la situación del precio del petróleo en los mercados internacionales. Sin embargo, aumentos de precios como ese tienden a provocar protestas, razón por la cual Bolsonaro instituyó un recorte de dos meses en los impuestos al precio del diésel a partir del 1 de marzo.
Esto sucedió luego de que Petrobras anunciara el cuarto aumento de precio en el surtidor desde principios de año, poniendo a su director ejecutivo en curso de colisión con el presidente, lo que llevó a este último a decir la semana pasada que “algo sucederá en Petrobras en los próximos días”.
Según un informe de Reuters. La amenaza siguió a los comentarios hechos por Castello Blanco sobre la posibilidad de una huelga de camioneros en respuesta a los precios más altos.
Las acciones de la Petrobras han cerrado con un desplome de más del 20% este lunes en la Bolsa de São Paulo mientras el índice general ha caído casi un 5% y el dólar ha llegado a 5,50 reales(2).