La situación financiera que atraviesa Pemex le pasará factura hasta el año 2020, por lo menos en lo que se refiere a la caída de la producción. Según la firma financiera Morgan Stanley, la producción de la petrolera estatal mexicana descenderá en 700.000 barriles de petróleo diarios respecto a los valores actuales.
De acuerdo con un informe de Morgan Stanley, la falta de tecnología y los fondos requeridos para modernizar yacimientos antiguos serán el motivo por el que la producción de Pemex podría bajar a alrededor de 1,6 millones de barriles diarios para el año 2020, es decir, a menos de la mitad del volumen de extracción que alcanzó en 2004.
Sólo en el mes pasado, la petrolera estatal mexicana vio como la producción caía un 4,97 por ciento.
En los últimos tres años, Pemex ha tenido déficits en su flujo de caja, que este año se duplicará, hasta alcanzar la brecha 22.000 millones de dólares, en comparación con 13.000 millones de 2015.
El problema de Pemex, según Morgan Stanley, tiene que ver también con elementos externos, como la caída en los precios y producción de petróleo a nivel mundial, lo que ha afectado a los países productores, entre ellos, México.
"México, que alguna vez fue el mayor proveedor de Estados Unidos por delante de Arabia Saudí, ha perdido peso porque el auge del esquisto ha reducido las importaciones de Estados Unidos y la caída del petróleo asestó un golpe a las esperanzas de la empresa de atraer miles de millones en inversiones extranjeras", señala Morgan Stanley en su informe.
Con liquidez e inversión insuficientes, considera el informe, Pemex seguirá contrayéndose incapacitada para restaurar su producción en zonas donde no tiene el conocimiento técnico requerido.
"Los precios más bajos del petróleo han puesto de manifiesto importantes deficiencias que deberán ser atendidas en los próximos años", destacó.
Por otro lado, los analistas consideraron que la constante caída en la producción de Pemex, también ha puesto de manifiesto fallos en el marco fiscal de la reforma regulatoria emprendida por el país en 2014 que puso fin a décadas de monopolio estatal para buscar la tan necesaria inversión extranjera.