(Depetroleo-Gonzalo Díaz). La caída de precios registrada en 2014, eliminó a varias compañías petroleras emergentes y a su vez, cambió la forma en que éstas operan, en función de adaptarse a los cambios en tiempos de crisis. Los desplomes en los mercados suelen estar seguidos de una etapa de prosperidad, ya que el costo de extraer crudo, tiene réditos luego de equilibrarse con el precio del barril con los costos de producción, lo que amplía más las ganancias.
Es precisamente el escenario actual, al que se llegó luego de que las compañías 'pequeñas' desaparecieron, y quedó libre el camino para que las 'Big Oil Companys' ganarán más protagonismo en el mercado.
"Las compañías petroleras más grandes del mundo sobrevivieron a una crisis que les cambió la vida, y ahora se disponen a cosechar frutos", detalla el informe de la entidad financiera global Goldman Sachs.
Es por ello, que las gigantes energéticas como ESSO, Shell, BP, Exxon, Chevron, Texaco, por citar algunas, están en un momento óptimo para gracias a los crecientes precios del barril y reducción de costos operativos, una ecuación que genera, aún un mayor margen de rentabilidad. A su vez, esto genera un mayor atractivo para los inversionistas, que luego de años de ver postergado sus márgenes de ganancias, según se desprende del informe de Goldman Sachs.
"Vemos esto como el comienzo de una nueva edad de oro para el renacimiento de las 'Big Oil Companys'", comentó el analista Michele Della Vigna, en alusión a las siete compañías petroleras no estatales.
En otro segmento del informe se detalla que "si bien es probable que esas inversiones arrojen un bajo rendimiento durante un tiempo, todos estos nuevos proyectos están ahora comenzando a producir, liberando capital improductivo y entregando a la industria el mayor aumento de producción y flujo de efectivo de las dos últimas décadas".