Las principales refinerías de China están parando su actividad en plena temporada alta por exceso de reservas. El gigante asiático es el mayor importador de petróleo del mundo desde 2014, con una demanda diaria de 6.5 millones bpd, lo que hará justamente decrecer la demanda global aproximadamente un 6% a nivel mundial.
En términos estratégicos, China ha mantenido fuerte su actividad en los últimos años aprovechando la baja de precios para ampliar sus reservas y capacidad de refinamiento. Sin embargo, lo inusual de esta decisión es que se presenta en temporada de alto consumo, aumento de demanda y desplazamientos internos.
Las principales refinerías de PetroChina han bajado su volumen de producción en Jinzhou. En Fushun, la planta permanecerá cerrada 45 días. Y las actividades de Sinopec serán recortadas en 260.000 bpd, un equivalente a 5% con respecto al año pasado.
"Las refinerías se han dado cuenta que el mercado interno no puede absorber la gasolina y diésel, y la única manera recortar producción." explicó Gao Jian, analista de China Sublime Information Group.
Además comentó que "la capacidad de refinación caerá 1.3 millones de barriles por mantenimiento de 4 refinadoras estatales y seis refinadoras independientes." En tal sentido aseguró "esperamos reducir gradualmente el excedente, exportar más productos petroleros y poner más presión a los mercados."
Fuente: elEconomista.com