(Depetroleo-Gonzalo Díaz). En un contexto global de una creciente guerra comercial, la Reserva Federal de Estados Unidos aumentará esta semana las tasas de interés por tercera vez en este año, en un claro intento por evitar que la inflación aumente demasiado rápido, mientras la principal economía del mundo crece cada vez más.
Esta decisión comenzará este martes, 24 horas después que la administración Trump aplique una nueva ronda de aranceles contra productos chinos por 200.000 millones de dólares, llevando a 250.000 millones de dólares los bienes gravados del gigante asiático.
Lo que representa un recrudecimiento entre las relaciones entre Estados Unidos y China en particular, y en general arrojará un manto de incertidumbre acerca del panorama económico mundial.
Al respecto, algunos analistas, señalan que la creación de trabajos y el PBI estadounidense, goza de muy buena salud, con aumentos de sueldos y un 'enfriamiento' de la inflación, al tiempo de que las mediciones de la industria y el mercado inmobiliario figuran entre las actividades que no se han desacelerado. En resumen, los embates de la guerra comercial, no han hecho mella en la economía norteamericana.
Ya oportunamente, desde el Fondo Monetario Internacional, se advirtió que una escalada en la disputa comercial, provocaría "un significativo costo económico". Pero con la robustez de la economía estadounidense, la FED señaló que espera continuar con los incrementos "graduales" de las tasas de interés, lo que afectará gravemente el crédito. Para fines de año, es probable que el banco central vaya a aumentar la tasa de referencia por cuarta vez, en tanto se especulan tres incrementos en 2019.
Esto significa que la tasa llegará al 3% o 3.25% para diciembre de 2019, un número muy por encima del cual los estrategas económicos ven actualmente como "neutral", en el sentido que no estimula ni restringe la economía.
"Con el estímulo del Gobierno para dar viento de cola a la demanda en los próximos dos años, parece razonable esperar que aumenten las tasas neutrales a corto plazo", estimó Lael Brainard, gobernadora de la FED.