(Depetroleo-Gonzalo Díaz). Gracias al impulso de la nueva política energética del actual mandatario de la Casa Blanca, Donald John Trump, Estados Unidos está produciendo más gas natural y se encamina a liderar el mercado mundial del gas en 2020.
En virtud de los avances en la producción de gas exquisito, especialmente en el noreste, Estados Unidos es el mayor productor mundial de gas natural desde 2009. Sus extracciones en 2017 fueron de 2.000 millones de metros cúbicos por día.
Estados Unidos ya exporta a sus vecinos México y Canadá a través de gasoductos, pero para llegar a mercados más distantes debe apostar al gas natural licuado (GNL), que puede ser transportado fácilmente por mar.
Las exportaciones de GNL norteamericano tomaron impulso en 2016, cuando Cheniere Energy despachó un buque tanque desde su terminal de gas en Sabine Pass en Luisiana. Antes de eso, los despachos de GNL partían de la terminal de Alaska, que fue cerrada en 2015.
Más de la mitad de producción de GNL tiene como destino a México, Corea del Sur y China, y un tercio sale a los mercados europeos.
Los envíos de GNL se cuadruplicaron desde 2017, por primera vez en 60 años, convirtiendo así a Estados Unidos en un país exportador neto.
Con una estructura de una terminal terminada recientemente en marzo, y cuatro más hacia fines de año, las exportaciones de GNL estadounidense deberán crecer a razón de 272 millones de metros cúbicos por día.
En consecuencia, Estados Unidos debería convertirse en el tercer mayor exportador mundial de GNL detrás de Australia y Qatar, de acuerdo a un informe de la Agencia Internacional de Energía.
En tal sentido, las estimaciones de la Agencia, proyectan el crecimiento de la demanda en 1.6% por año hasta 2040, contrariamente a un crecimiento de 0.5% anual del petróleo y un 0.2% anual para el carbón.
Son varios los funcionarios europeos que, especulan que luego de la salida de Estados Unidos del pacto nuclear con Irán, la Casa Blanca impulsaría medidas contra el petróleo y el gas iraní, y así poder expander su dominio energético sobre Europa del este.
Asia es también un mercado muy codiciado. La Agencia Internacional de Energía calculó que 80% del crecimiento de la demanda proyectada hasta 2040, corresponderá a los mercados emergentes de China e India.