(Depetroleo-Gonzalo Díaz). Fuentes diplomáticas con sede en la ONU en Nueva York revelaron al periódico israelí Maariv que están evaluando los planes de Estados Unidos para llevar a cabo un ataque táctico contra Irán en respuesta al ataque a petroleros en el Golfo Pérsico el jueves.
Según los funcionarios, desde el viernes, la Casa Blanca ha estado manteniendo discusiones incesantes con altos comandantes militares, representantes del Pentágono y asesores del presidente Donald Trump.
La acción militar bajo consideración sería un bombardeo aéreo de una instalación iraní vinculada a su programa nuclear, afirmaron los funcionarios.
“El bombardeo será masivo, pero se limitará a un objetivo específico”, dijo un diplomático.
La decisión de llevar a cabo una acción militar contra Irán fue discutida en la Casa Blanca antes del último informe de que Irán podría aumentar el nivel de enriquecimiento de uranio.
Irán superará el límite acordado internacionalmente en sus reservas de uranio poco enriquecido en 10 días, dijo el lunes el organismo de energía atómica del país.
Un portavoz de la Organización de Energía Atómica de Irán dijo que el país aumentaría los niveles de enriquecimiento al 20%, significativamente más cercano al material apto para armas, para su uso en reactores locales, pero enfatizó que Europa todavía tenía la oportunidad de rescatar el acuerdo nuclear de 2015 si es los signatarios restantes encontraron una manera de proteger a la República Islámica del efecto paralizante de las sanciones económicas de los Estados Unidos.
Por su parte, Irán amenaza con seguir contrarrestando las sanciones de Estados Unidos, mientras los demás signatarios del acuerdo nuclear no compensen los daños económicos que se le han causado, e incluso con retirarse del TNP (Tratado de No Proliferación), que impide a los países desarrollar armas nucleares.
Las fuentes agregaron que el propio presidente Trump no estaba entusiasmado con un movimiento militar contra Irán, pero que perdió la paciencia en el asunto y que le concedería permiso al secretario de Estado Mike Pompeo, quien está presionando para que actúe.
Pompeo ha hecho repetidas declaraciones contra Irán en los últimos días. Afirmó que no hay duda de que las recientes explosiones de petroleros en el Golfo fueron llevadas a cabo por Irán. La posibilidad de un ataque estadounidense se produjo en el momento del deterioro de las relaciones entre los Estados Unidos e Irán, en el contexto de la retirada de los Estados Unidos del acuerdo nuclear hace un año, y de las sanciones a la economía de la República Islámica.
Teherán está amenazando con revertir sus obligaciones en virtud del acuerdo nuclear un año después de que la administración Trump se retirara y volviera a imponer sanciones punitivas sobre la economía iraní, principalmente su sector petrolero, la mayor fuente de ingresos del país.
Además de la confrontación por el programa nuclear de Irán, Estados Unidos acusa a Teherán de intentar extender su brazo a través de Oriente Medio y desestabilizar la región desde Yemen hasta Siria.