(Depetroleo-Gonzalo Díaz). Con Estados Unidos desplegando tu arsenal diplomático y comercial para impedir la importación de petróleo de Irán, los gobernantes iraníes volvieron a recurrir a la retórica y las amenazas veladas, una estrategia que manejan a la perfección.
La Guardia Revolucionaria (Pasdarán), respaldó este miércoles una ambigua advertencia del presidente de Irán, Hasan Rohani, contra cualquier intento de privarlos de su principal fuente de ingresos, alentando la propuesta de que planean interrumpir el suministro de petróleo a sus vecinos como represalia.
En una breve carta al mandatario iraní que se ha difundido por la Agencia informativa Ima, el general Qasem Soleimani (el más popular entre los de Pasdarán), expresó la disposición de su ejército para llevar a cabo ese proyecto.
"Según reflejan los medios de comunicación, usted dijo que si el petróleo de la República Islámica de Irán no puede exportarse, tampoco habrá garantías de que pueda hacerlo el resto de la región (...). Como soldado de esta nación, me gustaría expresarle mi gratitud", afirmó el general, un héroe en la lucha para defensa del Estado iraní.
Tal entusiasmo en los ámbitos castrenses, radica en las palabras del presidente Rohani, el último lunes durante su encuentro con ciudadanos iraníes residentes en Suiza.
"Los estadounidenses afirmaron que quieren detener por completo las exportaciones de petróleo iraní. No entienden el significado de esta declaración, porque no tienen ningún sentido que no se exporte el crudo iraní, mientras que se exporta el de la región", aseguró Rohani, según la web presidencial.
Ante la comparecencia pública, Rohani, de gran capacidad dialéctica, continuó el juego dialéctico: "Asumir que Irán llegará a convertirse en el único productor que no pudiera exportar su petróleo es una solución errónea... Estados Unidos nunca podrá interrumpir los ingresos de petróleo de Irán".
Recordemos, que en pasado, en especial durante el mandato de Mahmud Ahmadineyad, se hizo habitual que, cada vez se Irán se sentía amenazado por Estados Unidos, los portavoces iraníes amenazaban con bloquear el estrecho de Ormuz, por donde a diario circulan unos 17 millones de barriles de crudo, el 20% del crudo mundial y el 35% del que se comercializa por vía marítima.